Shadowman
es uno de los personajes más conocidos del Universo Valiant. Sus comics vieron la luz el 1 de mayo con el número 1 de la mano del
gran Jim
Shooter a los guiones y Steve
Englehart y Mike Manley a los dibujos. Pero, ¿qué hizo a este peculiar
superhéroe convertirse en uno de los favoritos de la editorial?
Sin duda, su gran fama llegaría
posteriormente, en la época en que se transformó en un personaje habitual de
los videojuegos a finales del siglo XX. Una vez Acclaim adquirió la editorial y Jim Shooter dejó la casa que él
mismo había ayudado a crear, pudimos ver a Shadowman paseando sus habilidades
por la PlayStation 2, entre otras, en diversas entregas.
Sin embargo, este personaje es mucho más que
eso. Sus cómics en la primera época, en los 90, vendieron más de 5 millones de
copias alcanzando en su colección inicial las 80 entregas. Es más, se
tradujeron a multitud de idiomas, incluyendo el filipino o el noruego, además
de los más habituales.
Y aún hay más, su fama llegó a ser tal, que
incluso el alcalde de Nueva Orleans, ciudad en la que se centraban sus
aventuras, le dedicó un día. Así pues, si estás en la localidad un 17 de enero,
desde 1993 se conmemora el Día de
Shadowman (no es coña).
¿Quién es Shadowman en el Universo Valiant?
Podemos afirmar que en sus inicios, Shadowman fue un personaje franquicia de
Valiant. Este nombre era el alter ego de Jack Boniface, un músico que tocaba en distintos locales de la
ciudad y era un aliado poderoso de la noche.
Pero las andanzas de este ser nocturno, pese a
que en sus buenos tiempos superaron incluso a franquicias de las todopoderosas Marvel y DC Comics, cayeron en
desgracia en 1996, bajo el desastroso trabajo editorial de Acclaim, que tuvo
más suerte con los videojuegos, pero que no supo dominar el medio comiquero.
Así pues, a pesar del éxito del primer
videojuego del personaje, que vio la luz en 1999 en consolas como PlayStation,
Nintendo 64, Dreamcast o incluso en PC, su historia editorial se resentiría
hasta finalizar su andadura hasta nueva orden.
No dejes de seguirnos, porque esto no acaba
aquí… Continuará…
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